La predicción se cumplió.
La luna menguante del día 15 en Piscis será el motor que estabas esperando para deshacerte de todas las situaciones, personas o cosas que ya son inútiles en tu vida.
Si todo el mes había estado de maravilla, a partir del lunes, todo ha ido para arriba y arriba... Mi carrera se acabó, ya no más clases, ni vacaciones, ni tareas, ni trabajos, ni colegiaturas. ¡Finito! Supongo que agarre eso de pretexto inconsciente para resolver muchos otros asuntos (
entiéndase chaquetas mentales) que durante la carrera me atormentaron y en cierto sentido me inspiraron. Decidí cosas, y saqué a personas de mi vida. Creo que es un buen momento. Afiancé algunas amistades que conocí durante la carrera. Y ya sé cuál es el siguiente paso. En general, me siento de maravilla...
...Y como gran recompensa a estos cuatro años, el jueves fue extraordinario, por no decir maravilloso, creo que había olvidado sensaciones tan tan tan tan profundas, sinceras e ilusorias...
Todo paso así. Quede de verme con Remo, a las 6 para ir a ver Vals con
Bashir a la
cineteca.
Salí 6.20 del servicio y en lo que estaba esperando vi pasar un auto con un hombre
guapísimo de
copiloto y se me
hizo muy conocido y de pronto hice
clic. ¿Será?
Me espere, me hice tonto, y después de que el auto se estacionará y lo vi descender... Claro, si es, pensé... y no supe que hacer... atontado. Apenas buscando una libreta o un programa del
MIX. Y de pronto paso junto a mi caminando rápidamente junto a otro muchacho con una cámara. Yo solo corrí tras él, lo tome del brazo y el volteo y con el peor inglés de mi vida, le dije... Can
you give me
an autograph? El sonrió y me dijo:
Yes! Más apenado mientras murmuraba algo al acompañante con el que iba. Algo así como:
You were right... Me firmo... y yo no supe que más decir más que
Thank you. El me sonrió y se
fue, igual de apurado, y quizá hasta un poco avergonzado de haber sido reconocido.
Yo no tuve más remedio que desfogar mi emoción con
Lalo. Le hable y le
conté todo con detalles y muy emocionado... En ese momento llegó Remo... con su cara
multiexpresiva de no entender que estaba sucediendo. Colgué con
Lalo y se lo explique. Su cara seguía siendo la misma... compramos los boletos y entramos a la
cineteca y adentro lo volví a ver y le dije a Remo. Remo traía un iPhone y le dije que me tomará una foto con él. Y me dijo que sí. Pero al penoso de mi, le daba pena volverlo a interrumpir... hasta que ya no pude más y llego el momento de entrar a la sala... y me volví a acercar, igual de nervioso y como el
fan más enloquecido... El volvió a sonreír, como nadie y me dijo que sí.
Aquí la foto:
Para los que no lo conocen... él es
Jey Crisfar... famoso por la inigualable, insuperable, increíble película de
Bruce LaBruce, de la que tanto he escrito en el blog.
OTTO;
OR,
UP WITH DEAD PEOPLE... en la que
Jey es el que interpreta a
Otto...
Si alguien alguna vez ha visto o conocido a su amor platónico en persona, podrá entenderme, y quién no, espero algún día lo haga... es una sensación inexplicable... De pronto todo se resume a ese momento, a ese
clic de la cámara que se traduce en eternidad.
Después vino Vals con
Bashir, que pese a mi cansancio fue una experiencia maravillosa. De lo mejor que he visto en cine este año, por mucho... ya después vino el auto, la charla sin
sapes, la bolsa a rayas, el café y mi chocolate corriente al ritmo de la música y Remo cantando y la lluvia amenazante y purificadora en el sentido poético de la palabra... Cuando estaba en el metro rumbo a mi casa, tenía la sensación de que había sido un maravilloso día... mi corazón latía lleno de
Jey, de
Bashir, de Remo, de música, de chocolate, y lluvia...
Llegué a mi casa, y me conecté. En mi correo ya estaba mi foto con
Jey... sonreí... como dije aún tengo fe en la humanidad...